Existe la creencia generalizada de que las firmas determinan si un cuadro o un dibujo es auténtico o no. Cada semana la gente nos pide que les digamos si una firma es auténtica porque esperan que esto que esto determine si la obra de arte es auténtica. La realidad es muy distinta. La firma no estaba en el pasado. Sólo hay un Miguel Ángel que está firmado. Leonardo no firmó ninguno de sus cuadros. Hasta aproximadamente 1950, la mayoría de los artistas firmaban cuando vendían una obra o la entregaban a la galería con la que trabajaban. La consecuencia era que cada artista tenía cientos o miles de obras en su estudio que no estaban firmadas. Cuando el artista moría, dejaba todas estas obras sin firmar. Su comerciante o los miembros de su familia las firmaban por él para poder venderlas. Por esta razón, un gran número de obras auténticas no estaban firmadas por los artistas que las crearon. Aunque sigue siendo útil comprobar y comparar las firmas, sobre todo en el caso de los artistas activos después de 1950, no es tan crucial como mucha gente cree. Cuando hay texto, además de la firma, se abre la puerta a comprobar si de la firma, permite comprobar si se trata del puño y letra del artista. A veces el texto se encuentra en el reverso y ocasionalmente una dedicatoria o algo similar en el anverso. Lo que se espera del texto es que sea del artista. Si desea comprobar la escritura a mano, o averiguar si una firma es posiblemente del artista, ofrecemos nuestros servicios. Ofrecemos tanto opiniones como exámenes forenses forenses oficiales de firmas y caligrafía.